Los seguros de defensa legal son pólizas diseñadas para cubrir los costos de asesoramiento y representación legal en caso de disputas judiciales o extrajudiciales.

Son especialmente útiles para individuos y empresas que desean protección ante problemas legales sin incurrir en altos costos de abogados y procedimientos judiciales.
¿Qué cubre un seguro de defensa legal?
Dependiendo de la póliza contratada, un seguro de defensa legal puede cubrir:
- Asesoramiento jurídico: Consultas con abogados sobre temas legales.
- Gastos judiciales: Costos de juicios, honorarios de abogados, tasas judiciales, peritos, etc.
- Negociaciones extrajudiciales: Mediación para evitar juicios.
- Defensa penal: Representación en procedimientos penales.
- Reclamaciones civiles: Por daños y perjuicios, incumplimientos de contratos, etc.
- Defensa en sanciones administrativas: Multas de tráfico, sanciones laborales, etc.
Tipos de seguros de defensa legal
Existen diferentes tipos de seguros de defensa legal según la necesidad del asegurado:
✅ Defensa legal general
Cobertura amplia para distintos tipos de problemas legales, tanto civiles como penales.
✅ Defensa legal para conductores
Protege ante sanciones de tráfico, reclamaciones por accidentes, retirada de carnet, etc.
✅ Defensa legal laboral
Para empleados o autónomos en disputas con empleadores o clientes.
✅ Defensa legal para empresas y autónomos
Asesoramiento y cobertura ante litigios comerciales, contratos, impagos, etc.
✅ Defensa legal en consumo
Reclamaciones contra empresas por compras defectuosas, incumplimiento de garantías, etc.
✅ Defensa legal inmobiliaria
Protege propietarios e inquilinos ante problemas de alquileres, comunidades de vecinos, desahucios, etc.
¿Por qué contratar un seguro de defensa legal?
✅ Evita gastos imprevistos en caso de problemas legales.
✅ Acceso a asesoría jurídica especializada.
✅ Mayor tranquilidad y seguridad ante cualquier conflicto legal.